Acantilados y calas vírgenes, con un horizonte plagado de islotes
Pequeña y paradisíaca calita, sólo accesible a través de un sendero peatonal
Preciosa y recóndita cala de pescadores, al final de la bahía de Es Cubells
Pequeña y bella iglesia de Sant Antoni, nunca consagrada y hoy convertida en restaurante
Una playa pequeña y encantadora, con ambiente familiar y dos buenos restaurantes
Espacio musealizado que difunde la historia, la flora y la fauna de los estanques
La avenida principal de Sant Antoni concentra múltiples terrazas junto a fuentes y pantalanes
Pequeño rincón de arena y agua de color turquesa, a continuación de Cala Gració
Playa de arena con chiringuitos abiertos todo el año, en la bahía contigua al puerto de Eivissa
Importante pieza de arte sacro, con una de las más bellas vírgenes de la iconografía medieval española