Entorno cultural para disfrutar del arte y conocer la forma de vida de los ibicencos de hace cien años
Cala recóndita de pescadores, en el entorno de Sant Vicent de Sa Cala
Templo de idéntica factura a las iglesias rurales, reconstruido en 1708
Templo de finales del XVIII, erigido en un mirador con vistas a la capital y a la costa
Espacio musealizado que difunde la historia, la flora y la fauna de los estanques
Extenso arenal bajo acantilados, de tradición nudista y ambiente variopinto
Cueva con pinturas rupestres, en una abrupta zona de acantilados
Pequeña cala de grava, con algunas casetas varadero y un paisaje precioso con la presencia del islote de Tagomago
Templo encalado del siglo XVIII, con un amplio porche y campanario esquinado
Finca-museo del siglo XVII, con una casa payesa que se mantiene como hace cien años