Pueblo del interior, declarado "de interés artesanal", repleto de bares y restaurantes
Pequeño templo erigido en el siglo XVIII, para atender a los trabajadores de las salinas
Exhibió de forma permanente el legado del pintor catalán, desde los años sesenta hasta 2011
Templo de finales del XVIII, erigido en un mirador con vistas a la capital y a la costa
3.000 años de historia pitiusa a través del legado de distintas civilizaciones
Playa de arena cercana a Sant Antoni, con el islote de Sa Conillera en el horizonte
Uno de los pueblos con más ambiente durante todo al año, repleto de bares y restaurantes
El segundo mayor templo de la isla, con atractivos frescos y un altar mayor genovés