Pequeña y paradisíaca calita, sólo accesible a través de un sendero peatonal
El templo que los conquistadores cristianos mandaron construir en lo alto de Dalt Vila, en 1235
La avenida principal de Sant Antoni concentra múltiples terrazas junto a fuentes y pantalanes
La calle más animada de la ciudad, repleta de pequeños restaurantes, bares de copas y la zona gay
Antigua casa payesa con torre de defensa, próxima al Poblado de Balàfia
Cueva con pinturas rupestres, en una abrupta zona de acantilados
Molino harinero restaurado y abierto al público, en un cerro frente al puerto de Eivissa
Pequeño y agradable rincón rodeado de bosque, en el interior de la Urbanización Roca Llisa.
Está situado al sur de la isla y concentra los pueblos de Sant Josep, Sant Agustí, Es Cubells y Sant Jordi