Este pequeño pueblo, despoblado hasta el siglo XVIII, representaba el lugar más aislado de Ibiza
Puertos deportivos, discotecas y hoteles de lujo, en un trayecto que ofrece las mejores vistas de las murallas
Merendero al aire libre con barbacoas y una zona forestal, repleta de hornos de cal y carboneras
Antigua fábrica textil de estilo modernista, reconvertida en teatro-auditorio municipal, biblioteca y centro cultural
Cala de piedras a los pies de un acantilado, con uno de los beach club de moda en Ibiza
Idílica cala de la bahía de Porroig, con fondos de arena y piedra y un intenso color turquesa en el mar
El segundo mayor templo de la isla, con atractivos frescos y un altar mayor genovés
El primer gran teatro de la ciudad y famosa sala de conciertos de jazz hasta marzo de 2018
Escultura en bronce que rinde homenaje a la cultura hippie, en el puerto de Eivissa
La atalaya de vigilancia con el paisaje más espectacular de Ibiza