Un auténtico puerto natural, de aguas cristalinas, con multitud de servicios
La atalaya de vigilancia con el paisaje más espectacular de Ibiza
El templo de Peralta, del siglo XVIII, destaca por la espadaña esquinada y el porche con columnas y arcos
Una ciudad laberíntica, de cal y piedra, en el interior de una fortaleza renacentista
Un templo rural con una orientación atípica, a causa de una decisión salomónica
Mercado tradicional de verdura, construido en el siglo XIX con forma de templete griego
Precioso templo fortaleza con una torre de vigilancia (s. XVI), en lo alto de una colina
Extraordinario paisaje agrícola, repleto de bancales, acequias, canales y albercas de tiempos musulmanes
Laberinto de calles históricas, repletas de palacios y casas encaladas, que ascienden y descienden entre murallas
El mayor puerto natural de la isla, orientado al poniente, alberga la localidad más turística de la isla